Tú, siempre por
el cigarro obsesionado
yo, por tus
labios a los que amo.
Acabas
perdiéndote cada una de las noches
entre tragos de
tequila y yo...
yo solo tato de
encontrar las estrellas
en tus pupilas.
Al fin y al
cabo,
cada uno es
dueño de los vicios
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