¡Qué
suerte la mía!,
vivir
en un mundo de fantasía
donde
existen las hadas madrinas,
y
un príncipe azul que me acompaña cada día.
Suerte
no necesitar zapatito de cristal,
ni
besos para poder despertar.
No tener que esperar a que me vengan a salvar,
pues
mi príncipe mola más
y
me alienta a batallar.
Suerte
no precisar de vestidos
para
que me llame princesa,
y
poder recomendarnos libros
sin
que sea él ninguna Bestia.
Serendipia
es haber coincidido
en
cuestión de tiempo y lugar,
para
que formes parte hoy
de
mi felicidad.
0 comentarios:
Publicar un comentario